Una de las imágenes más representativas de la escultura religiosa del siglo XVIII.
En esta sala se puede apreciar a San Miguel, reconocido como el príncipe de los arcángeles.
Es una de las imágenes mas representativas de la escultura religiosa guatemalteca del siglo XVIII, manifiesta en su composición movimiento extremo, expresión gestual y un estudio anatómico propio de artistas académicos o conformación de taller durante el periodo barroco.
En la postura de esta obra se puede apreciar lo que se denomina como serpientata o movimiento en forma de – S -.