El estofado es un claro ejemplo de la influencia de la cocina europea en la gastronomía guatemalteca, adaptada a los ingredientes y gustos locales.
A lo largo de los años, se han desarrollado diversas versiones de estofado en diferentes regiones del país, cada una con su toque distintivo
En una cacerola grande ponga a calentar el aceite y agregue la carne previamente cortada en trozos medianos, hasta que esté frita de ambos lados.
Por aparte, corte los vegetales en cuadritos y agréguelos a la cacerola. Sofría durante diez minutos a fuego medio. Luego añada las ramas de tomillo, las hojas de laurel y el vinagre, y verifique la sazón.
Dore en una sartén la canela, la pimienta de Castilla y los clavos de olor. Luego tritúrelos en la piedra de moler (o páselos por la licuadora) hasta obtener un polvo fino. Agréguelo a la preparación.
Tape la cacerola y cocine la preparación a fuego bajo por al menos dos horas.
Sirva con arroz blanco y ensalada de remolacha