Es un fresco que se elabora con dos ingredientes prehispánicos que eran de alta importancia
para la cosmovisión de la cultura Maya, se trata del cacao y el maíz. Esta bebida natural es la
favorita de muchos pobladores de oriente, además de tener un sabor agradable y una textura
peculiar, es un aliado perfecto para refrescarse en las horas del día con mayor calor.
Ponga el maíz y el cacao a dorar por aparte, hasta que tomen un color marrón.
Una vez el maíz esté dorado, muélalo hasta convertirlo en polvo. Para esto puede usar una piedra de moler o bien una licuadora.
Por aparte, cuando el cacao se haya dorado, descascárelo y después, muela las semillas hasta convertirlas en polvo.
Mezclar la harina de maíz y el cacao en polvo.
Disuelva la mezcla en un recipiente con 3 litros de agua, agregue una pizca de achiote, la canela en polvo, el azúcar y revuelva hasta conseguir el fresco.
Para obtener mejores resultados se recomienda licuar y agregar hielo.